martes, 29 de septiembre de 2015

It's Justified

"-No puedes irte así. No puedes abandonar sin más.
Su voz resonó por la sala, casi una súplica. Casi sonrió al escucharle. Casi. Pero no se giró a mirar. Se acercó a la puerta, y la abrió, dispuesto a irse.
-No puedes.
Se detuvo, y ahora sí, se ladeó para ver su cara ofendida. Humillada. Se encogió de hombros.
-He hecho lo que vine a hacer aquí. Claro que puedo irme.
Ella apretó los puños, sus manos palidecieron por la fuerza. Deseó que esas uñas de porcelana tan cuidadas se le partieran.
-¿Estás muerto por dentro? No puedes marcharte sin más.
-Si quieres hacerlo poético, de acuerdo. Soy un desierto por dentro. Me marcho sin más porque hay quien me espera. Y porque no quiero quedarme aquí.
-¿Te esperan? ¿Quién? ¿Y nosotros?
Sonrió, una sonrisa torcida y canalla, de quien ha pasado demasiado tiempo viendo que la vida no es justa, y se ha acostumbrado a ello.
-¿Qué nosotros?
Salió de la habitación, cerrando suavemente la puerta.
Le daba igual escuchar un disparo."

Morning, ma'am.
He vuelto al viejo y salvaje Oeste. Y eso está bien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario