viernes, 2 de mayo de 2014

Sniper

Tu cara denota naufragio,
la arena dice que has encallado.
Entre arrecifes te quedaste varado,
quizá la marea alta te arrastrará consigo.

Y el único tesoro que lleva tu navío
es un corazón tatuado que se ha perdido.

Todo es demasiado relativo, y aunque no sepamos nada, seguiremos aquí.
Entre vasos vacíos y hielos derretidos, entre alcohol que queme la garganta enmohecida; por más emociones que intentemos ahogar. Seguiremos aquí. Entre viejas fotos y recuerdos que clarean por los bordes, entre bromas deslucidas y noches sin color. Oleremos la amargura y nos pondremos a reír. No cabe la desdicha de todos en una maleta. Ni la resaca es tan dura si brindamos con cerveza. Dejaremos que las sombras se vayan con las ratas a las esquinas, y que las luces se acomoden en la barra.
Y la pista de baile se llenará de niebla, de humo, de desconocidos que intentarán meternos mano. Pero seguiremos aquí. Por mucho que se empeñen en tirarnos al callejón. Por mucho que nos quieran sacar los colores. La vergüenza no es bienvenida en nuestro grupo. El cupo de locos ya lo llena el borracho que invita a chupito tras chupito de lágrimas y carcajadas.
Así que coged los tacones, sacar las uñas y gritad. Llenaremos de graffitis la ciudad, la victoria será nuestra. Nuestra tropa vencerá la guerra por más que nos borren las batallas. Por más que nos detengan, nuestra frase seguirá ahí. Seguiremos aquí.
Sólo las ratas bailan claqué.


No hay comentarios:

Publicar un comentario