No puedo evitarlo.
Cada vez que cae en mi poder un libro/película/cómic o similar que habla o tiene un personaje/grupo de personajes pertenecientes a cualquier Iglesia, a la Inquisición, con ideales férreos como los que muestran Ubertino da Casale, o Bernardo Guy, la delegación franciscana, o Jorge de Burgos en "El nombre de la rosa" (por poner un ejemplo)...
...sólo soy capaz de ver un grupo de fangirls emocionadas dando chilliditos.
En plan exagerado, además.
Fangirls enloquecidas. En plan secta "amor-a-x-artista-es-el-mejor-del-mundo-quiero-un-hijo-suyo". Y me río, mucho.
Creo que estoy mal de la cabeza, pero ¡es tan graciosa la imagen!
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